lunes, 30 de septiembre de 2013

Compartimos "Memoria en Palabras", con alumnos y docentes del Instituto San Fernando Rey, en Resistencia

"Dejar leer es, ante todo, compartir nuestra propia experiencia de lectura. Compartir, no la lectura, en abstracto, sino el leer, la lectura vivida: cómo llegué a ese libro, cómo me sedujo, cómo lo conseguí, dónde lo leí, cómo, con quién… Compartir incluso las experiencias fallidas. Esto es algo que no se puede lograr sino viviendo la experiencia de la lectura. Pero, por encima de todo, lo mejor que podemos hacer para prepararnos como promotores es vivir la experiencia de la lectura."
Dejar leer, Luis Bernardo Peña Borrero.


"Leer en voz alta es, de alguna manera, muy parecido a cantar. Nos sentimos expuestos frente a los demás, sentimos que hay algo «que tenemos que hacer bien» y que todos nos estarán juzgando. Entonces será bueno que quienes trabajamos con los alumnos recordemos que hacer leer en voz alta no es un fin en sí mismo, sino una manera más de desarrollar el gusto por la lectura y, sobre todo, el gusto por la palabra. La palabra leída, la palabra en nuestra boca, en la boca de los compañeros. La palabra que aquí suena dulce; allá, tímida; allá, demasiado fuerte; en otro, quebrada por la emoción o el susto. En suma, el pensamiento y el sentimiento hechos sonido."
Luis María Pescetti en Juegos de lectura en voz alta.

Abrimos la jornada leyendo La composición de Silvia Schujer
de la colección Memoria en palabras
El miércoles 18 y el viernes 20 de septiembre participamos de las actividades de la "Semana de la Cultura" brindando dos talleres de lectura en voz alta junto a más de 80  alumnos del Profesorado de Lengua del Instituto San Fernando Rey

Mostramos un catálogo editado por el Plan Nacional de Lectura 
llamado 300 libros que compone el acervo de la Biblioteca, 
acogedor lugar donde realizamos el taller
¿Por qué leer en voz alta?
Aunque los niños ya sepan leer, es importante seguir leyéndoles en voz alta. Esta actividad les resulta muy placentera y los ayuda a:
- Continuar asociando la lectura con sentimientos de ternura y placer.
- Fortalecer sus habilidades para escuchar.
- Ampliar su vocabulario.
- Aprender nuevos conceptos.
- Aprender acerca de la manera en que se organizan los relatos.
- Explorar nuevos temas y campos del conocimiento.
- Conocer y descubrir qué autores y qué estilos les gustan más.
- Sentirse motivados para leer por su propia cuenta.

Tampoco faltaron las lecturas donde el fútbol se cruza con la literatura.
Los libros álbum atrapan a grandes y a chicos.
Algunas recomendaciones:
Antes de leer, cree un ambiente propicio para la lectura: sin ruidos, en un lugar cómodo y asegurándose de que los niños estén interesados en la propuesta. Presente el libro que leerán, su título, su autor. Pregunte si lo conocen o se imaginan de qué se trata. Si el libro tiene ilustraciones, permita que los niños las vean a medida que usted lee. Lea pausadamente y con voz clara.

Luego de la lectura, distribuimos publicaciones
literarias de autores como Osvaldo Soriano
editadas por Plan Nacional de Lectura.
Si los alumnos no comprenden alguna palabra o frase, deténgase para explicarla con sus propias palabras. Ellos también pueden hacer aportes. Luego de leer, conversen sobre lo leído como quien charla a la salida del cine sobre la película que vio. No les formule preguntas que los hagan sentir evaluados.Luego de leer, relacione el libro que leyó con algún otro libro que hayan leído en el pasado y conversen sobre las similitudes y diferencias.


María C. Venegas identifica entre los criterios a tener en cuenta al seleccionar un cuento a leer: el contenido de la historia, el auditorio (en cuanto a su familiaridad o no con la actividad), la disponibilidad de tiempo y las circunstancias en que se da la presentación del material así como los objetivos que se desean alcanzar. En particular en cuanto al contenido, la autora recomienda que posean las siguientes características: "una mezcla de cotidianeidad, humor y fantasía; una intriga bien construida y mucha acción; un mínimo de descripciones largas; imágenes y comparaciones familiares adaptadas al grupo y la presencia de repeticiones y fórmulas que permitan concentrar la atención y sean atractivas y memorables".


Texto extraído de BUENOS LIBROS PARA LEER, BUENOS DÍAS PARA CRECER. 2 Ministerio de Educación de la Nación